En diciembre del año 2008, fue aprobada la nueva Ley de ciencia, tecnología e innovación por unanimidad. La importancia de esta Ley radica en que ahora Colombia podrá insertarse con mayor facilidad entre los países competitivos gracias a una mayor destinación del Producto Interno Bruto (PIB) en Investigación y Desarrollo.
Los impulsadores de esta ley, Jaime Restrepo Cuartas y Martha Lucía Ramírez, liderados por el Departamento Nacional de Planeación, aseguran que Colombia generará mayor valor agregado a los a los productos y servicios que se producirán desde ahora. Además están convencidos que la industrias colombianas ahora podrán ser más innovadoras y competitivas.
La Ley permite invertir el 1% del PIB en investigación y desarrollo. El nuevo modelo que se gestionará desde este momento será el de tener una amplia correlación entre la productividad de la empresas y la investigación. “Esto significa que surgirán empresas de base tecnológica, creadas a partir de la investigación, que “formalizará un modelo económico sistémico” y fomentará la generación de empleo con mayor estabilidad”[1].
Según el director del Instituto Colombiano para el Desarrollo de la Ciencia y la Tecnología (COLCIENCIAS), Juan Francisco Miranda, con la nueva Ley se cumplen dos objetivos importantes: En primer lugar, Colciencias ya no será un establecimiento público, sino que se convierte en un departamento administrativo con autonomía presupuestal, donde asumirá las funciones de coordinación del sector.
Así mismo, podrá participar en el Consejo de Ministros y en el Consejo Nacional de Política Económica y Social, Conpes, y tendrá a cargo la administración del Fondo Nacional de Financiamiento para la Ciencia, la Tecnología y la Innovación, creado como patrimonio autónomo y administrado a través de un contrato de fiducia mercantil[2].
Esta nueva Ley reconoce la importancia de que un país invierta en Investigación y Desarrollo, que permita generar mejores tecnologías que permitan un avance rápido de un país.
Esta ley pasará a sanción presidencial, la cual tiene como marco la “Visión Colombia II Centenario 2019” y el Plan Nacional de Desarrollo 2006-2010, “Estado Comunitario: desarrollo para todos”.
